El próximo 20 de noviembre, McDonald’s destinará el 100% de las ventas de Big Mac a la Fundación Infantil Ronald McDonald, cuya misión es ser un “hogar fuera del hogar” para las familias durante los tratamientos médicos de sus pequeños
El próximo viernes 20 de noviembre, coincidiendo con el Día Mundial del Niño,la hamburguesa más icónica de McDonald’s, el Big Mac, costará lo mismo, pero valdrá mucho más. Y es que, como cada año, todos los restaurantes, empleados y proveedores de la empresa de restauración en España y Andorra unirán sus fuerzas en McHappy Day: el día más solidario de la compañía. ¿El objetivo? lograr la mayor recaudación posible para la Fundación Infantil Ronald McDonald, con el fin de que pueda seguir ayudando a miles de niños y niñas enfermos y a sus familias a través de las Casas y las Salas Familiares Ronald McDonald en diferentes puntos de nuestro país. El calor, cariño y cercanía de la familia es fundamental para la recuperación de los más pequeños, y este espíritu es el que se esconde detrás de McHappy Day y de la aportación a esta causa a través del Big Mac.
En esta vigesimotercera edición, y con el fin de adaptarse a las circunstancias sanitarias, se contará con la colaboración de los cuatro partners que dan servicio a la plataforma de McDelivery de la compañía: Just Eat, Uber Eats, Deliveroo y Glovo. Todas estas compañías han puesto en marcha distintas iniciativas beneficiosas para el usuario para así incentivar el consumo del Big Mac. La Fundación Infantil Ronald McDonald lleva 20 años ofreciendo un “hogar fuera del hogar” a las familias de niños y niñas enfermos durante sus tratamientos médicos, ayudándoles a mantenerse unidos mientras los pequeños reciben la atención sanitaria que
necesitan. Con la recaudación por la venta de Big Mac durante McHappy Day, se cubren las necesidades completas de un año en una Casa Ronald McDonald, lo que supone un ahorro de más de 1.000.000€ anual en hospedaje, aparcamiento y transporte para el total de familias alojadas.
Además de esta jornada solidaria, la compañía aporta el 0,1% de las ventas anuales de todos los restaurantes de España y Andorra a la Fundación Infantil Ronald McDonald, respaldando e impulsando así su imprescindible labor.
Para Jose Antonio García, director de la Fundación Infantil Ronald McDonald, “McHappy Day es ese momento del año en que el apoyo de todos tiene más valor que nunca. En la Fundación tenemos la enorme suerte de contar con McDonald’s como principal socio y, con su compromiso con las familias y la infancia logramos seguir ayudando a más familias que nos necesitan. Este año, debido a la crisis sanitaria, hemos notado un considerable incremento en el número de solicitudes por parte de familias, por lo que para nosotros esta edición cobra un sentido mucho más importante si cabe.”
Cuatro Casas, tres Salas Familiares y 10.906 familias ayudadas
A través de las Casas y las Salas Familiares Ronald McDonald y gracias al incesante trabajo de sus equipos, la Fundación Infantil Ronald McDonald ha podido ayudar, desde su creación en el año 2002, a un total de más de 10.906 familias y 4.875 niños enfermos.
La Fundación Infantil Ronald McDonald cuenta actualmente con cuatro Casas Ronald McDonald, ubicadas en Madrid, Barcelona, Málaga y Valencia. Allí, las familias encuentran un espacio de paz y tranquilidad durante el tratamiento médico de sus hijos e hijas. Además, están acompañadas por un equipo de gestión y de voluntarios las 24 horas, todos los días del año, y hallan al mismo tiempo un gran apoyo en otras familias que atraviesan su misma situación. En las Casas las familias comparten las zonas comunes como los salones, cocinas, salas de juego y bibliotecas además de contar con una habitación individual con baño.
Por otro lado, las tres Salas Familiares, ubicadas en el Hospital Universitario La Paz en Madrid, el Hospital Infantil Vall d’Hebron en Barcelona y el Hospital Virgen de la Arrixaca en Murcia, son verdaderos refugios dentro de los hospitales, tanto para los niños y niñas en tratamiento como para sus acompañantes. Estas salas son un pequeño oasis de calma y normalidad dentro del tenso ambiente médico, que les permiten además no tener que separarse de sus hijos e hijas en un momento tan delicado.
