La Ponencia Técnica de Patrimonio Histórico, dependiente de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, ha resuelto favorablemente el modificado del “Proyecto de Ejecución de Restauración, Consolidación y Puesta en Valor de las Cisternas Romanas de ‘La Calderona’ de Porcuna”.
En sesión celebrada en el día 26 de agosto, la Ponencia ha informado favorablemente la intervención propuesta, consistente en el redimensionado del acceso a las cisternas, sitas en el Camino de San Marcos de la localidad jiennense, acción necesaria tras los recientes hallazgos de excavaciones realizadas. “Se ha valorado positivamente el modificado del proyecto al cumplir una doble finalidad, la continuidad del trazado viario y la protección de los restos hallados”, ha explicado el delegado territorial, Jesús Estrella. El responsable de Cultura en la provincia ha destacado la “agilidad con la que trabaja la Consejería para ejercer la debida tutela y, la vez, facilitar a los ayuntamientos inversiones e intervenciones que redunden en la conservación y puesta en valor del profuso y diverso patrimonio arqueológico de la provincia”.
Conforme al artículo 33.3 de la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía es necesaria la autorización de la Consejería competente en materia de Patrimonio Histórico previa a la aprobación de las restantes licencias puesto que se produce cambio o modificación en inmueble objeto inscrito dentro de la delimitación de Bien de Interés Cultural, categoría Zona Arqueológica.
La Resolución favorable para la ejecución, restauración, consolidación y puesta en valor de las Cisternas Romanas de ‘La Calderona’ se emitió el 5 de septiembre de 2019. En esta ocasión, la solicitud de modificado de la misma viene derivada de los trabajos de excavación realizados y los nuevos restos arqueológicos hallados. Se trata de la modificación del acceso a la cisterna del proyecto inicial que consistía en un túnel, proponiendo ahora la construcción de un puente, para así resolver tanto la continuidad del trazado viario que se ha visto afectado por dichos trabajos, como proteger los restos hallados.
La propuesta presentada consiste en la construcción de dos bandas de pilotes de 55 centímetros de diámetro (5 en cada banda), coronados con un encepado de hormigón armado de canto 75 centímetros, sobre el que se colocarán unas vigas de hormigón prefabricado de 70 centímetros de canto, y sobre estas, se desarrollará un tablero de hormigón armado de 45 centímetros de canto. Los pilotes se ubicarán en terrenos donde se ha alcanzado el nivel geológico y se ha agotado la secuencia arqueológica, ocupando espacios interiores de las estancias excavadas, procurando afectar lo mínimo posible a las estructuras existentes.
La solicitud de la documentación definitiva tuvo entrada el 5 de agosto en la Delegación Territorial de Cultura y Patrimonio Histórico, que la abordó en un periodo de 21 días para dar, finalmente, luz verde.
