El consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, ha comprobado este lunes los tratamientos selvícolas preventivos que se desarrollan en Sierra Larga, en el Parque Natural de Sierra María-Los Vélez (Almería) que, de forma conjunta, cuentan con una inversión de 1.088.103,16 euros; uno de los cuales se desarrollará durante los próximos dos años.
Acompañado por el delegado territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul en Almería, Manuel De la Torre, y por el director conservador del Parque Natural, Jaime De Lara, Fernández-Pacheco ha visitado unos trabajos que, en materia de prevención, “resultan útiles y eficaces a la hora de evitar incendios forestales”, según ha valorado.
Tanto en una como en otra actuación, se trata hacer diferentes tipos de cortas de arbolado de prevención de incendios forestales, de mejora y de regeneración. En la primera de las actuaciones visitada, en los montes de Sierra Larga, montes públicos de la Junta de Andalucía, y en ‘Silos o Cuesta del Alcaide’ y ‘Serrata de Guadalupe’, montes públicos municipales de Vélez Blanco y Vélez Rubio consorciados con la Junta, se va a actuar para conservar de modo adecuado los terrenos forestales por un importe de adjudicación de 548.347,61 euros. Las obras adjudicadas este pasado noviembre se prolongarán durante dos años.
Asimismo, esta misma semana se tiene previsto terminar con las actuaciones de un segundo proyecto similar a este en el que se han invertido 539.755,55 euros en los montes ‘Zorreras y Chicharrones’, ‘El Gabar’, ‘Los Madroños’ y ‘Cerro de La Tejera’.
La adecuación del Plan Forestal Andaluz con horizonte 2030 en el que trabaja la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, establece la necesidad de que la gestión forestal sostenible se traduzca en intervenciones e inversiones que permitan conservar de modo adecuado los terrenos forestales y, en particular, las formaciones arboladas.
Son estos tratamientos selvícolas preventivos los que garantizan la persistencia y estabilidad de las formaciones forestales y las actuaciones de prevención de incendios, cuyo riesgo “es cada vez más alto”, según ha considerado el consejero. “Esta apuesta de la Junta de Andalucía por la gestión forestal sostenible no se queda sólo en palabras”, ha subrayado Fernández-Pacheco, que ha insistido en cifras y “en hechos”.
Solo en la provincia de Almería son siete los proyectos selvícolas que la consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul ha tenido o mantiene en ejecución este 2022 en los montes con un presupuesto de 4.193.235 euros. Se actúa o se ha actuado en un total de 2.529 hectáreas de bosque almerienses en 20 municipios de la Sierra de Filabres, Sierra Nevada, Sierra de Gádor y Sierra María-Los Vélez, además de en el resto de la zona norte de la provincia.
También se está ejecutando un proyecto de restauración forestal de 700 hectáreas de terrenos afectados por incendio forestal con una inversión de casi 600.000 euros, otros dos proyectos de conservación de especies de flora endémica y mejora de hábitats de fauna amenazada, con una inversión de 518.236 euros, así como un proyecto plurianual de mejora de caminos forestales en los que se han invertido durante 2022 más de 900.000 euros.
Asimismo, el consejero ha anunciado que, en las próximas semanas, la consejería tiene previsto licitar otros dos proyectos de tratamientos silvícolas en montes públicos de Sierra de Filabres y Sierra Nevada, también en la provincia de Almería, en los que se prevé actuar sobre 730 hectáreas de masas forestales con un presupuesto de licitación de 1.745.863 euros.
Los tratamientos selvícolas se realizan bajo el paradigma de la gestión adaptativa para el fomento de sistemas forestales más resilientes, favorecen la diversificación de masas procedentes de repoblación y la consolidación de formaciones mixtas, con estructuras más equilibras.
Reducen la espesura de masas excesivamente densas y favorecen la evolución y la persistencia de la masa, garantizando su regeneración, explican desde de la delegación territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul.
El monte mediterráneo mantiene, tradicionalmente, funciones protectoras y ecológicas (protección del suelo frente a la erosión, regulación del régimen hídrico incrementando la recarga de acuíferos y disminuyendo la escorrentía y los efectos de las lluvias torrenciales sobre las zonas habitadas, conservación de hábitats y biodiversidad), funciones productoras (madera, corcho, caza, plantas aromáticas, pastos, apicultura) y funciones sociales o recreativas.
A ellas, ha señalado el consejero, se ha unido otra función: la captura de CO2 de la atmósfera y su fijación bien sea en los productos que del monte se obtienen o al suelo del bosque en forma de materia orgánica. “Hay que tener en cuenta que mediante el astillado o triturado de los restos de los tratamientos silvícolas se incorporan al suelo muchas toneladas de carbono en forma de materia orgánica”, han apuntado.
Del mismo modo, el carácter preventivo frente a los incendios que tienen las actuaciones que la Junta de Andalucía está acometiendo en los montes, persigue evitar la liberación brusca de grandes cantidades de CO2, que es uno de los efectos inmediatos de los incendios forestales.
En este sentido, la adecuación del Plan Forestal Andaluz propone considerar el mantenimiento de los ecosistemas forestales en un buen estado de conservación como herramienta para atenuar los efectos del cambio climático y la posibilidad de incluir aprovechamientos de biomasa y productos maderables en el marco del mecanismo de compensación de emisiones.
