El Ayuntamiento de Sevilla ha fundamentado la reciente paralización de las obras en el resturante Río Grande, situado en la calle Betis, en el hecho de que los trabajos “se iniciaron sin licencia”, de modo que cuando se “ha detectado esta anomalía, se ha intervenido”.
Así lo ha expresado el delegado municipal de Hábitat Urbano y Cohesión Social, Juan Manuel Flores, en respuesta a una pregunta oral al respecto formulada desde las filas del grupo municipal Podemos-Izquierda Unida en la comisión de control y fiscalización del equipo de gobierno, a través de la concejal Susana Serrano, quien ha pedido “explicaciones” sobre la citada cuestión.
Flores ha esgrimido que “uno detecta que hay una anomalía cuando ésta se produce, y entonces interviene. Lo mismo hicimos en verano cuando estaban actuando sobre elementos que no estaban recogidos en la licencia de reformado”, ha añadido, por lo que “se obligó entonces –al propietario del restaurante– a su restauración”. Asimismo, el delegado municipal también ha destacado que tras un informe relacionado con el deslinde con Costas, se ha suspendido “de manera cautelar” la licencia, hasta que se conozca el dictamen de Medio Ambiente.
El delegado de Urbanismo ha subrayado que se trata de una obra de “especial seguimiento técnico” y que velarán en todo momento por el “cumplimiento estricto de la normativa; si hay que poner sanciones, no le quepa duda –en alusión a Serrano– de que actuaremos”, ha aclarado Flores.
La formación morada ha afirmado que la “reacción” de Urbanismo se ha producido “como consecuencia de las multiples denuncias ciudadanas aparecidas en redes sociales”. Desde la coalición de izquierda se ha insistido en la idea de que las instalaciones que se están llevando a cabo sobre la cubierta de Río Grande “contaminan visualmente” al “impedir contemplar” el río, en una zona que se corresponde con el antiguo muelle de las Mulas, al tiempo que ha reclamado que “se recupere el dominio público marítimo terrestre del río”.
Flores ha reconocido que desde el Ayuntamiento también se trabaja “desde la perspectiva de la denuncia ciudadana cuando los vecinos perciben un problema y lo comunican”, así como por iniciativa del Distrito en cuestión, en este caso el Distrito Triana-Los Remedios, con reuniones entre la delegada y los vecinos”.