Agentes de la Policía Nacional especializados en desactivación de artefactos explosivos (Tedax) han intervenido una antigua granada de mortero reglamentaria que fue localizada por una mujer durante la limpieza de un trastero de una vivienda en Motril (Granada) y que tras su inspección se ha determinado que no poseía carga explosiva alguna.
La intervención policial comenzó cerca de las doce y media de la mañana tras recibir la Policía un aviso por parte de esta mujer informando del hallazgo de este artefacto potencialmente peligroso con la apariencia de ser una granada de mortero.
La primera en llegar al lugar fue una dotación policial de Seguridad Ciudadana adscrita a la propia comisaría de Motril, siendo ellos quienes consiguieron ampliar la información inicial aportada en la llamada y comprobar que, efectivamente, se trataba de una granada de mortero real, no simulada que había sido localizada por la nueva propietaria de un piso de segunda mano comprado recientemente, siendo precisamente durante los trabajos de limpieza de su trastero cuando se encontró con el proyectil de artillería.
Los agentes del Tedax de la Policía Nacional comprobaron que era una granada de 81 milímetros con el exterior oxidado. Tras adoptar todas las medidas de seguridad y autoprotección necesarias, determinaron que el artefacto carecía de carga explosiva, así como de carga de proyección, necesaria par su disparo, encontrándose éste completamente inerte.
Es sabido que este tipo de proyectil explosivo fue muy utilizado por unidades tanto de infantería como de artillería durante la Guerra Civil española, habiéndose convertido en la actualidad, tras convertirlo en un objeto inerte eliminando su carga explosiva, en objeto de coleccionismo.
Tras verificar que su manipulación o transporte no implica riesgo alguno se procedió a su traslado a las dependencias policiales de la unidad de Tedax-NRBQ de la Jefatura Superior de Andalucía Oriental, donde ha quedado en calidad de depósito a disposición de la autoridad judicial.
La Policía Nacional recuerda, como regla de oro, que ante la aparición de este tipo de artefactos los ciudadanos deben abstenerse de moverlo o manipularlo dado su peligro potencial a pesar del paso del tiempo y deben avisar de inmediato a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
