El Ayuntamiento de Sevilla ha informado este martes de que ha autorizado una licitación de urgencia para contratar servicios privados adicionales de control de organismos nocivos, que refuercen el actual dispositivo en la lucha contra la desratización en la ciudad.
La concejala de Consumo, Salud, Cementerio y Protección Animal, Silvia Pozo, ha expuesto que “es prioritaria la eliminación o al menos reducción de los roedores”; anunciando “grandes batidas por la ciudad para solucionar los problemas”.Según la edil, la cifra de 78.500 euros anuales que tenía asignada el Ayuntamiento para contratar labores privadas de desratización y desinsectación en apoyo al Centro Municipal de Protección y Control Animal resulta “ridícula en comparación con ciudades vecinas como Huelva”, que invertirá 309.500 euros según señala. Por eso, ha apostado por “aumentar el presupuesto en 25.000 euros, porque el dispuesto para este año ya estaba prácticamente agotado” al comenzar el actual mandato.Además, Pozo, ha defendido que “el Gobierno actual está solucionando el caos organizativo en el zoosanitario y el servicio de laboratorio en general, por la falta de gestión del anterior gobierno” del PSOE, al que ha reprochado “la mala gestión administrativa que se ha llevado a cabo desde 2018 en el servicio de desratización del alcantarillado”.
SIN “LOS RESULTADOS ESPERADOS”
Pozo ha afirmado que “en los últimos años las intervenciones en materia de lucha integral contra la desinfección, desratización y desinsectación para la ciudad de Sevilla han sido escasas y no han dado los resultados esperados”.Por esta razón, Pozo ha explicado que el Ayuntamiento ha aumentado el control y revisión de las arquetas de las calles y el efecto y la calidad del veneno que se emplea contra los roedores; además de que “ya se está trabajando en la programación de 2024 en esta materia para revertir la desorganización e improvisación” que achaca al PSOE.
“EXIGENCIAS” A LAS EMPRESAS
“De hecho, para la próxima contratación exigiremos a las empresas que aseguren un porcentaje mínimo de reducción de la población de ratas, incluyendo la obligatoriedad de utilizar rodenticidas más potentes. Tenemos previsto aumentar gradualmente las inversiones en esta materia en los próximos cuatro años”, ha enfatizado.Para finalizar, Silvia Pozo ha explicado que los técnicos municipales “han comprobado que existen deficiencias importantes en la actividad desarrollada por la empresa contratada por el Gobierno anterior”. “En las inspecciones posteriores al tratamiento desarrollado por esta empresa contra las ratas en el alcantarillado público se confirma la incorrecta instalación de los raticidas, la falta de revisión de los trabajos y la dejadez a la hora de estudiar la eficacia de las intervenciones”.
