La diputada de VOX por Málaga y vicesecretaria de Portavocía, Patricia Rueda, ha calificado la situación de la Comisaría de Fuengirola de «insostenible», que afecta a los propios agentes que trabajan allí como a los ciudadanos que acuden a realizar sus denuncias. Y ha recordado que estas instalaciones atienden a su vez a los vecinos de Mijas.
Ha recordado al Ejecutivo que es el responsable y que debe de garantizar la seguridad y la higiene en el puesto de trabajo de los agentes de Policía «tal y como recoge el artículo 40 de la Constitución Española.
Además, Patricia Rueda se ha dirigido al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien debería «dejar de gastar tiempo en difamar sobre VOX» y «ponerse a trabajar por nuestros agentes». La diputada ha mostrado su preocupación porque «en sus manos está la vida de nuestros policías y nuestra seguridad», y ha pedido directamente su dimisión.
Sin medios humanos ni materiales
De hecho, ha reiterado «el abandono al que se somete a los agentes, en infraestructuras. Además, no cuentan con medios ni humanos ni materiales, exponiéndoles a un grave peligro».
Por su parte, Luna ha destacado el trabajo que ha realizado VOX en el Congreso, donde Rueda ha realizado preguntas, y ha presentado una Proposición No de Ley, en la se solicitaba que en un plazo no superior a seis meses se iniciaran la rehabilitación y el acondicionamiento de la Comisaría de Fuengirola y se dotara a los agentes de medios humanos y materiales.
La comisaría se inauguró en 1979 para unas necesidades completamente distintas a las actuales. Rueda ha hecho hincapié en que es una Comisaría que cuenta con una alta actividad ya que tiene Unidad de Policía Judicial y lucha contra el crimen organizado en la Costa del Sol. Y ha recordado, además, que «es una demanda histórica de los representantes sindicales del Cuerpo Nacional de Policía”.
