Tras dos años de pandemia, Andalucía ha vuelto a batir récord en el sector turístico esta Semana Santa al recibir a 878.000 turistas, la cifra más alta de la serie histórica para este periodo vacacional y un 9% más que en 2019, último año antes de la crisis provocada por el Covid. En total, los alojamientos hoteleros y casas rurales han registrado más de 1,3 millones de pernoctaciones, con un grado de ocupación media del 73% que ha superado el 84% durante el puente, en ambos casos por encima de las previsiones y muy cerca ya de los datos de hace tres años.
Para el vicepresidente de la Junta y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, estas cifras demuestran que el sector turístico andaluz “es indestructible y eso es gracias al trabajo de nuestros profesionales”. “Somos líderes porque entendimos que tras la pandemia se iniciaba un nuevo ciclo turístico y había que encarar ese nuevo tiempo”, ha destacado tras subrayar el diálogo y la colaboración con el sector en el diseño de las políticas de la Consejería.
Con un gasto medio por turista y día de 72,4 euros (sin incluir los costes del viaje), los ingresos registrados han alcanzado los 317,3 millones, ya que la estancia media en la comunidad ha sido de cinco días. Son cifras aún por debajo de 2019, cuando los ingresos rozaron los 370 millones, debido a que la estancia se ha recortado un día y medio, si bien marcan una senda de recuperación que augura que la temporada turística que ha abierto la Semana Santa acabará con datos ya similares a los de prepandemia.
Así lo demuestran las las 670.375 pernoctaciones alcanzadas entre el Jueves y el Sábado Santo, con un 84,2% de ocupación, apenas un punto menos que en las mismas fechas de 2019, que fue un año récord.
De hecho, en algunas tipologías de alojamiento como las casas rurales ya se han superado las cifras de entonces, con un grado de ocupación medio del 48,3% durante toda la semana (frente al 47,1% de 2019) y del 73,7% en el puente (frente al 73,1%). En el caso de los establecimientos hoteleros, la ocupación media durante la semana ha sido del 75,2% (78,8% en 2019) y del 85,2% de jueves a sábado (apenas un punto menos que la registrada en el último año antes de la pandemia).
También hay provincias que se sitúan ya en datos prepandemia, como Huelva -que ha registrado la ocupación más alta y estable durante toda la semana- y Jaén, así como en Cádiz y Sevilla durante el puente mientras que Málaga, que ha concentrado el 40% de las pernoctaciones con más de 541.000, roza ya los registros de antes de la crisis sanitaria. No obstante, todas las provincias han superado las previsiones iniciales gracias a las reservas de última hora. En el caso de Almería, se han mejorado en cuatro puntos las cifras previstas en la recta final de la semana. Córdoba las ha incrementado en siete puntos y Granada, que es la tercera provincia en número de pernoctaciones, en seis.
Como viene siendo habitual, el día con mayor número de estancias ha sido el Viernes Santo y el reparto de viajeros entre el litoral y el interior es cada vez más equilibrado (51,3% y 48,7% respectivamente).
“No nos conformamos, queremos seguir siendo el mejor destino del mundo y por ello debemos afrontar los nuevos desafíos que el Turismo nos presenta”, ha defendido Marín, quien ha insistido en la necesidad de seguir trabajando en colaboración con los profesionales y apostando por la seguridad, la digitalización, la formación y la innovación para ser cada vez más competitivos.