Tres personas han sido detenidas por la Guardia Civil en Montequinto, perteneciente al municipio sevillano de Dos Hermanas, tras una persecución por la carretera, con disparos al aire incluidos, para que los presuntos ladrones pararan e intentar evitar que se llevaran por delante el control instalado para su captura.
Según han informado fuentes del instituto armado a Europa Press, la persecución fue iniciada el jueves por la noche después de que el dueño de una finca de la localidad sevillana de Utrera diera aviso a la Policía Local de que había sorprendido a varias personas intentando robarle gallos de pelea.
Tras ello, la Policía Local intenta detener el vehículo con los presuntos ladrones a bordo, pero huye hacia Sevilla, dándose alerta al resto de fuerzas de seguridad para su detención, entre ellas a la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de la Guardia Civil (Usesic), que los intercepta en Montequinto.
En este marco, los agentes llevan a cabo tres disparos disuasorios al aire ya que los presuntos delincuentes “no tenían intención de parar y se iban a llevar por delante el control establecido”. Finalmente, la Guardia Civil consigue efectuar la detención a las 22,00 horas del jueves, tal como han adelantado varios medios de comunicación, de los tres individuos implicados, los cuales “no opusieron resistencia” en el momento del arresto.
Dos detenidos por un tiroteo en la barriada de Cerro Blanco de Dos Hermanas
Agentes de la Policía Nacional han detenido a dos personas por un presunto delito de amenazas graves tras su implicación en un tiroteo ocurrido en la barriada de Cerro Blanco de la localidad sevillana de Dos Hermanas.
Los hechos tuvieron lugar en la calle Manzanilla de la localidad nazarena, en torno a las 12,15 horas del pasado día 26. La policía fue alertada por unos disparos que se estaban produciendo en la citada barriada, según informa en un comunicado.
La rápida intervención de los agentes de seguridad ciudadana y de policía
judicial de la Comisaría permitió la detención de un padre y de su hijo,
“quienes habían amenazado, según los testigos, a otra familia, al parecer
por diferencias vecinales, y realizaron múltiples disparos con escopetas con intención de intimidar y amenazarla”, si bien, “no resultó herida ninguna persona”.
Los agentes procedieron a la intervención de tres escopetas del calibre 12mm, que eran propiedad de uno de los detenidos.
